ELONA QUIMPERIANA.

Hola amigas/os. Comenzamos semana y hoy aquí disfrutamos del Sol, hemos disfrutado de un día precioso, aunque las noches aún son muy frías. Y ya vamos a la entrada de hoy, seguimos con  los vecinitos a los que les encantan  las noches y  la humedad. En esta ocasión, se trata del precioso caracol de Quimper. Son caracoles que viven en lugares muy húmedos, con abundantes líquenes, hojas y musgos. Las paredes y cuevas son también parte de su hábitat. La primera vez que los vi en mi aldea, estaban en una vieja pared cerca de una fuente y había pocos, desde aquel día, los fui controlando y viendo su progreso. Curiosamente el año pasado observé alguna noche como el Cárabo pasaba largos ratos en ese lugar, no sabía que controlaba y este año llegué a la conclusión de que eran los Quimper su objetivo. Y porque? Pues porque  los  caracoles  de repente  cambiaron  de lugar  les hice un seguimiento y  vi como fueron bajando  por las paredes y llegar hasta las casas, sin duda tienen capacidad para buscar un sitio más seguro. Este otoño pude comprobar con alegría que en una pared que da al riachuelo los había muy grandes, pero también  muy pequeños y en bastante cantidad. Salen las noches lluviosas y lo hacen nada mas oscurecer, hacen su recorrido para alimentarse y de nuevo desaparecen en los agujeros de la pared. Con ellos  os  dejo, no sin desearos una feliz semana. Besos y abrazos...

SED INMENSAMENTE FELICES.

CU-CU, HOLA!

BESOS💚